A nadie se le escapa que vivimos en un país con una extensa oferta de festivales de música. Parece ahora imposible imaginar aquellos tiempos en los que no existían.
Esta proliferación de encuentros musicales ha hecho que cada día sea más difícil decidir a donde acudir, ya que la oferta es desmesurada. Los que tratamos de vivir de esto sabemos la dificultad que entraña organizar y desarrollar un proyecto de esta envergadura.
Para nosotros el poder participar en la evolución de un Festival como Santander Music, ha sido y sigue siendo un gran privilegio. Con él hemos ido creciendo y evolucionando a la vez que lo ha ido haciendo el encuentro santanderino. Quien haya acudido alguna vez coincidirá con nosotros en que el entorno es un privilegio. Muy pocos festivales pueden presumir de su situación en un enclave tan increíble: entre dos playas, en el centro de la ciudad (pero como si estuvieras en plena naturaleza), con unas vistas asombrosas a una de las bahías más impresionantes del mundo… la Península de la Magdalena la podríamos calificar como el lugar ideal para hacer un festival.
Si una virtud ha tenido Santander Music ha sido su evolución. Año, tras año el encuentro cántabro no ha parado de crecer. Si lo tuyo son las grandes aglomeraciones, seguramente este no sea tu festival. Pero si buscas un lugar agradable, buen sonido, un entorno envidiable, buenas infraestructuras y un cuidado cartel este es tu lugar: Belle & Sebastian, Mando Diao, Keane, Crystal Figthers, Vetusta Morla, Lori Meyers, El Columpio Asesino, 2 Many Djs, Calvin Harris, ¡!!!… son algunos de los artistas que nos han puesto los pelos de punta y han logrado sacar brillo al sonido alta gama por el que siempre ha apostado el festival (L – Acoustics o Meyer Sound Lyon).
Santander Music, ha apostado por una cuidada imagen, sin ir más lejos este año Javier Mariscal será el autor del cartel de esta edición, anteriormente Tatsuro Kiuchi, Gianmarco Magnani o Julien Pacaud fueron protagonistas en el diseño del cartel. El compromiso con el arte ha sido una obsesión por parte de la dirección participando en Arte Santander, ofreciendo exposiciones y masterclass de diseño gráfico.
Además el festival poco a poco se va filtrando en la vida de la ciudad, hace dos años se inauguró el escenario Holograma, teniendo como entorno la playa del Sardinero y el año pasado se celebraron dos días de sesión vermú en la Plaza Tetuán y Plaza Machichaco, con grupos y Dj´s en directo y contagiando a toda la ciudad de frescura, cultura y buen ambiente.
En el recinto también hubo una gran novedad, la zona de mercadillo y food trucks hizo que los asistentes al encuentro tuvieran un lugar donde descansar, comer y disfrutar de una oferta al alcance de pocos festivales.
Si algo resume este festival es lo que el año pasado me comentaba un buen amigo que acudía por primera vez: “Lo que más me sorprende de este festival es el buen trato que te dan y que los trabajadores te sonríen cuando te atienden o les preguntas cualquier cosa. Es un festival que trasmite buen rollo”.