Nikki Hill, apodada como “La nueva sensación del Soul”, vuelve a Gijón para presentar su nuevo álbum “Feline Roots”. La poderosa cantante estadounidense, conocida por ser una de las voces más aclamadas, capaz de mezclar soul, blues y el rock ‘n’ roll más desgarrado y clásico de manera magistral, sigue así la extensa gira que empezó el pasado marzo por nuestro país.
Miércoles 6 de noviembre
A partir de las 20:30 horas
Teatro Albéniz
Entradas a la venta a partir de este miércoles 18 en www.mestizoproducciones.es
La nueva sensación del Soul
Bajo esta premisa se presentó a principios de años en nuestro país la gran Nikki Hill. Cantante, compositora y líder indiscutible, Nikki Hill se crió en Durham, Carolina del Norte con una curiosidad insaciable, siempre ha ido abriéndose su propio camino y creyendo siempre en su propio estilo, encontrando una conexión directa entre la energía que veía en los espectáculos locales en Chapel Hill y el intenso baile de alabanzas, los servicios religiosos en los que se gritaba el evangelio a los que asistía y cantaba hasta que fue una adolescente.
Su anterior álbum “Heavy Hearts Hard Fists” (2015), fue todo una declaración de intenciones. Con una feroz alma y el fuerte R&B con Rock and Roll Boogie y toneladas de actitud por partes iguales, el álbum fue recibido con muchos elogios por parte de la prensa y sus seguidores y mantuvo a Hill en gira por los Estados Unidos y Europa, agregando Australia, India y Marruecos a un ya impresionante calendario de giras con más de 30 festivales al año.
El nuevo disco de Nikki, “Feline Roots” se lanzó el pasado 16 de noviembre. Hill deja que su alma se desgarre con esta nueva colección de canciones, mostrando su postura ahora ya más conocida defendiendo a los pioneros de las raíces y el rock n ‘roll, mientras permanece en perpetuo movimiento hacia adelante, invitando a cualquiera que quiera participar en el viaje. La guitarra salvaje de Johnny Thunders, el rock de Bad Brains se mezcla con el reggae, el ritmo de Stonesy, Sister Rosetta Tharpe delira con el poder del gospel de Rockin, todos tienen un hueco.